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La Bicicleta Naranja

Un recorrido diferente, una forma atlética y particular de conocer Buenos Aires.

Cuando ven una hilera de bicicletas naranjas por la Avenida Libertador, los autos se hacen a un lado para permitir paso a un fenómeno que se ha vuelto un clásico de la ciudad porteña: La Bicicleta Naranja.

Hace varios años, en el barrio de San Telmo, surgió una nueva modalidad de recorrer y conocer Buenos Aires a través de tours guiados por la Bicicleta Naranja.

Así, además de poder alquilar bicicletas por hora o por día para visitar la ciudad también se puede optar por tres tours que recorren diferentes sectores de Buenos Aires: Zona Norte, Zona Sur, y el innovador Buenos Aires desde el Río, en el cual -en un determinado punto- se desciende de la bicicleta para continuar el paseo en kayak.

El tour de la zona Norte comienza en el pasaje Guiffra. Realmente, la velocidad de la bicicleta es lo bastante rápida para no aburrir y lo bastante lenta para poder contemplar todo con tranquilidad. Luego, se arriba a Puerto Madero para conocer la Fragata Museo y el Puente de la Mujer, entre otras cosas.

Con el continuo pedaleo se llega a los bosques de Palermo donde se encuentra un enorme jardín de rosas y, ni bien se sale de allí, se puede observar el monumento a Evita Perón, uno de los personajes más representativos de la historia argentina.

El recorrido emprende la vuelta por la zona de Recoleta –donde se puede conocer la Iglesia del Pilar, el Cementerio, la feria artesanal- y el barrio de Retiro hasta regresar al punto de salida en San Telmo.

Además de circular al aire libre y hacer un poco de ejercicio, la ventaja de moverse en bicicleta es que se puede recorrer zonas a las que ningún otro tipo de vehículo tiene acceso.

Los líderes de cada tour, además de conducir a los grupos por las rutas más atractivas y que menos demanda física representan, son guías turísticos que, en los enclaves más representativos de cada recorrido, ofrecen una explicación -en inglés y castellano- de la historia y las curiosidades del lugar.

Asimismo, cada excursionista queda cubierto con un seguro de vida y de accidentes. Junto a la bicicleta recibe un casco protector y una botella de agua o jugo -a elección- para mantenerse hidratado durante todo el paseo…